"...si soy tan irredimible, si soy tamaño error, si estoy tan roto, entonces… ¿de quién es la culpa? Es culpa de mi creador. Y ese no fue Dios, fuiste tú".
Luego que la rebelión de Gaeta no prosperara (aunque definitivamente estuve a su favor en cuanto al tema de los cylon y su incorporación a la flota humana), se nos presento un memorable capítulo "No Exit".
En el bullían las revelaciones y la información acerca de motivos y fines de los últimos cinco Cylon. Pero lo mas emocionante sin duda fue la aparición de la nave de Cavil y los diálogos que éste mantuvo con la quinto Cylon Ellen. En ellos se pudo apreciar el alejamiento (se agradece) de la clásica historia de Pinocho, en donde el ser creado trata de parecerse con todas sus fuerzas y por todos los medios a su creador humano, y aunque desde el punto de vista que la creación sea mucho más imperfecta que el creador, la búsqueda de la emulación se vuelve razonable. Pero cuando sucede lo contrario y un ser es sumamente inteligente y fuerte y tiene la posibilidad de obtener infinitas más cualidades que lo hagan superior, por que no optar ese camino.
Cavil reniega desesperadamente de las cualidades y sentimientos (colocados en su programación) que lo acercan y lo hacen más humano. Él anhela tener la capacidad de muchas más cosas, como la de presenciar una supernova y sentirla o tener una visión ilimitada. Acaso si alguno de nosotros pudiera lograr tal capacidad como para experimentar cosas como estas no buscaríamos hacerlas realidad, dentro de los límites de no dañar a nadie más en el camino por supuesto.
Éste cylon sabe de su condición de maquina y quiere parecerse lo menos posible a un humano. Busca ser mejor. Acaso todos los padres no buscan eso para sus hijos. Es en definitiva un punto de vista que se agradece hayan incluido en la serie, independientemente de si es que prospera o no en la trama.
