domingo, 26 de abril de 2009

Periodismo Ecológico II


Entrevista a Juan Pablo Chirito, periodista del diario Expreso

Por Joas Blas Olivares

Han pasado ya varios minutos esperando, así que en un descuido del encargado de la seguridad me dirijo de improviso hacia aquel sonido que proviene de un cuarto no muy lejano, un sonido de impresoras y rotativos enormes. He dado al menos diez pasos cuando una voz grave me llama y me dice que vuelva. Me invita a sentarme en una silla cercana. Regreso y le digo: “lo siento, curiosidad periodística que le llaman”. “Seguro” me dice y lo veo sonreír, me relajo un poco y tomo asiento.

Estoy en las instalaciones del diario Expreso, es cerca de las doce del mediodía y el motivo de mi visita es entrevistar al periodista Juan Pablo Chirito. Él es Presidente del Consejo Directivo de la Asociación Peruana de Periodistas Ambientales (APPEA) por ello una de las principales voces representativas del periodismo ambiental en el Perú, ganador de numerosos premios y reconocimientos gracias a sus alertadores artículos sobre la biodiversidad en el Perú, tales como “Salvemos las islas y puntas guaneras”, y “Urge crear más áreas marinas protegidas en el Perú”.

Mientras espero el guardia me ofrece una edición del New York Times que recientemente publicara el Expreso. Me entretengo leyendo un artículo en el que se habla de cómo en Holanda las islas costeras no son obra de la naturaleza, sino mas bien del hombre, allí literalmente se hacen las islas y es un trabajo extraordinario de ingeniería. Estoy tan fascinado con la lectura que luego de algunos segundos me doy cuenta que una persona se dirige a mí. “¿Eres Joas Blas?”, “Sí” respondo, “¿Usted debe ser el señor Chirito?”.

Me invita pasar al interior de las oficinas, ahí veo las hileras de computadoras donde numerosos periodistas tipean apresuradamente, hablan por teléfono y escuchan las noticias, de un pequeño televisor empotrado en el techo, todo al mismo tiempo. Me hace recordar aquella película de Alan Pakula, donde dos periodistas trabajando en similares instalaciones lograban destapar un caso sorprendente de corrupción presidencial.

En la mayoría de los medios (del Perú) hay una idea errada de que el tema ambiental no vende”, “Sin embargo la presión mundial, nos ha hecho ver problemas que son tangibles…, un ejemplo de ello es que en pocos años la escasez de agua va a ser evidente”. Tal vez estas frases con las que empieza dando su punto de vista sobre el panorama y el espacio que se le da a las noticias ambientales en los diarios, no sea tan llamativo para el público como la destitución de un presidente, pero no por ello deja de ser importantísimo a futuro, quién puede negarlo.

Ya instalados en su oficina chirito me comenta “los medios de comunicación están en la obligación moral de abordar el tema (ambiental)…” ante la pregunta de si es menester que los diarios deban publicar este tipo de notas. “Es cierto que aun existe cierta resistencia a publicar… debería hacerse, pero hay algunas limitaciones que el mercado impone…”

No es lo mismo
Al comentarme que de hecho se considera un periodista ecológico, pregunto ¿es lo mismo ser periodista ecológico a ser ecologista? “No es lo mismo…, somos periodistas y debemos tener esa claridad… muchas veces es inevitable no involucrarse por que estas convencido de qué es bueno, pero siempre tienes que volver y ver de manera objetiva los temas” “hay que ver las potencialidades de estos temas y también las dificultades”

¿Una de estas dificultades podría ser la renuencia de los medios por publicar cuando se encuentra en un conflicto con algún auspiciador? “Claro éste es uno de los grandes problemas de este periodismo, en algún momento también se me ha pedido que no toque estos temas, simplemente es cuestión de saberlo manejar y también depende de cada corporación periodística, si prefiere el tema comercial o mantiene una línea imparcial y defender algo que es justo. Tú como periodista tienes la obligación de defender una causa y que para la sociedad va a ser beneficiosa, pero de todas maneras te sujetas a las limitaciones. Por eso el interés actual de muchos periodistas peruanos de crear espacios nuevos, espacios en los que se pueda trabajar libremente ese tema, hay mucho trabajo por hacer”.

¿Como ve el mensaje que llega al público, al margen de los premios y el reconocimiento evidente? “En otros países el tema ambiental está más desarrollado, en el Perú no existe demasiada especialización, el periodista ecológico se ha formado por si solo, se ha documentado claro, ha asistido a talleres, pero sin embargo hay una técnica distinta y diferente que repercute en el interés que le vaya a dedicar el público. Ese en un problema, pero otro problema es el de la sociedad, es un problema cultural, a la gente no le interesa los temas ambientales. Obviamente nuestra sociedad esta preocupada por otros temas, la geste esta mas preocupada por los problemas reales, de si sube la leche, el pan, pero no le da importancia a Pastoruri y su colapso, o el Manu por ejemplo, no lo ven, no les afecta. Pero esa idea va a cambiar a corto plazo”.

Hablaba en un punto de la especialización del periodista ¿Cómo debe de ser esta, se debe dar en el medio, en las universidades? “En nuestro país debe existir como por ejemplo en brasil esta especialización puntual así como hay periodistas políticos, económicos, los hay ecológicos. Acá en nuestro país todavía se mantiene el periodista todista que sabe de todo un poco y al final no sabe nada. Las universidades tienen parte de obligación también claro”.

Y en cuanto a la publicación ¿Qué temas se tocan y con que frecuencia? “Los temas los seguimos abordando aunque no regularmente. Lo tratamos de hacer, llegar al punto de sacarlos interdiario por ejemplo”. “Existe el proyecto de publicaciones en la web con mucha mas frecuencia…”. “Actualmente se esta tratando el tema del parque automotor por ejemplo, se pretende beneficiar a un grupo importante pero no se tiene en cuenta la repercusión en la salud de la sociedad”.

Es cierto muchas veces se pretende hacer caso omiso a la calidad de vida, por el beneficio comercial, se ignora las repercusiones del tema ambiental mientras no afecte directamente al lector pero detrás de ello hay un grupo consciente que batalla por hacer llegar un mensaje que sirva en definitiva para el beneficio ulterior de la sociedad.

Concluye la entrevista y Juan Pablo me conversa un poco, me presenta algunos colegas suyos, me muestra las instalaciones, y solo puedo pensar en todo este trayecto, en lo mucho que me va a gustar ser periodista. Me despido, camino hacia la salida, miro al vigilante y luego que me entrega los documentos, pienso que tal vez en un futuro nos volveremos a ver y ya no tenga que pedirme estos para ingresar. Me retiro con esta idea, también con la idea de que el impacto ambiental esta latente se quiera ver o no, y en lo fabulosamente inteligentes que deben de ser los holandeses.


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